THE BOY BEHIND THE DOOR

Película de terror con un planteamiento simple y un escenario limitado en la que dos niños son secuestrados y uno logra huir. Pero al ver donde se encuentra, decide volver para intentar liberar a su amigo antes que sea tarde para él. Los directores extraen todo el partido posible de esta situación, creando una película tensa y angustiante a ratos, pero siempre entretenida

The Boy Behind the Door es el segundo trabajo del dúo de directores David Charbonier y Justin Powell. En su primera película, The Djinn, que se estrenó este año pero se rodó en 2018, planteaban una película que transcurría en un apartamento donde un niño debía afrontar una amenaza sobrenatural. Para este segundo trabajo siguen en una linea similar, ambientando toda la historia en una casa donde dos niños deberán luchar por su supervivencia contra unos captores monstruosos pero humanos. Las películas que transcurren por completo en escenarios tan limitados y con tan pocos actores tienen la ventaja de resultar muy económicas y a la vez no parecer baratas, por eso son un recurso muy usado en el terror. Eso sí, si la trama no mantiene la tensión o fallan los actores rápidamente se cae en el aburrimiento y la monotonía. No es el caso de The Boy Behind the Door, los directores logran mantener la tensión durante su hora y media de metraje.

La película empieza con dos niños de unos doce años, Kevin (Ezra Dewey) y Bobby (Lonnie Chavis) cruzando un campo de camino a jugar un partido de baseball. Por pequeños detalles vemos que son amigos y que sus vidas no son sencillas en ese rincón de Estados Unidos; sueñan con crecer lo suficiente como para poderse ir. Cuando se apartan un momento del camino son drogados, secuestrados y metidos en el maletero de un coche. Al cabo de un tiempo indeterminado Booby despierta solo en el maletero. Medio asfixiado, logra liberarse y salir del coche. Está en una casa aislada en el campo, lejos de cualquier núcleo urbano. Su primer impulso es huir, pero piensa en su amigo y decide quedarse e intentar liberarlo si puede. Cuando entra en la casa, ve que su secuestrador ha encandenado y encerrado a Kevin en una habitación del piso superior de la casa. Luego se va, pero mientras Bobby está intentando entrar en la habitación aparece un hombre en la casa. Por desgracia, superarle será sólo la primera de una larga lista de penurias por las que pasará durante la noche para sobrevivir.

The Boy Behind the Door es una película con un planteamiento muy simple pero muy bien realizada. La historia que nos plantea no va mucho más allá de las peripecias que sufre el niño protagonista para liberar a su amigo y sobrevivir a una situación terrible, pero está muy bien contada. Los directores logran situar al espectador al borde del asiento en muchos momentos, logran que sufras por el chico. La película está completamente basada en esto; hay muy poco diálogo. Las decisiones que toman los personajes no siempre son muy lógicas, a veces parece que las tomen para que la película pueda proseguir, pero eso no perjudica demasiado al argumento. Me pareció espectacular la interpretación de Lonnie Chavis, el niño protagonista. La dirección me pareció muy efectiva; dota a la cinta de ritmo y tensión en todo momento y engancha a la historia.

Aunque no creo que pase a la historia The Boy Behind the Door, está bien realizada y resulta muy entretenida. Los directores han demostrado que como poco son artesanos muy eficaces dosificando la tensión de una historia, algo básico en el género de terror. Tengo curiosidad por ver qué harían con más presupuesto y con una película más ambiciosa.

(c) 2021 Jordi Flotats