Thriller sucoreano con un protagonista que ni recuerda quien es ni sabe dónde está su cuerpo, ya que despierta en uno que no es el suyo y cada doce horas se cambia. Con esta premisa el director Yoon Jae-keun ha construido una historia con grandes dosis de acción.
Mucho cine, y mucho cine negro se ha realizado con personajes con pérdidas de memoria o con memoria incompleta, un recurso muy socorrido para crear intriga o narrar una historia de forma poco convencional. El mejor ejemplo que se me ocurre de esto es la espléndida Memento, de Christopher Nolan, cuyo protagonista se tatuaba las pistas que olvidaría al día siguiente para descubrir quien atacó a su esposa y le dejó con amnesia retrógrada. Pero hay sagas completas, como la del agente Bourne, basadas en un protagonista que no recuerda su pasado ni su identidad. Por eso la película surcoreana Spiritwalker, el segundo trabajo del director Yoon Jae-keun, circula por un camino más o menos conocido, introduciendo además el cambio de cuerpos a la mezcla.
La película arranca con un coche accidentado, un hombre herido de bala está al lado del coche mientras el homeless que ha llamado a los servicios de emergencia está saqueando el vehículo. El hombre es llevado al hospital, pero no recuerda en absoluto quien es, ni siquiera se reconoce en el espejo. Cuando llega al que parece ser su piso descubre que podría estar metido en algo turbio, pero enseguida algo extraño le sucede y despierta en el cuerpo de otra persona. Pronto descubre que estos cambios se producen cada doce horas y que los cuerpos en los que acaba no son el suyo, pero todos están relacionados con una turbia organización que también está investigando una mujer que parece conocer quien es realmente.
Spiritwalker usa al actor protagonista, Yoon Kye-sang, casi todo el tiempo a pesar de que esté cambiando de cuerpo. El cambio se explica mediante reflexiones en espejos o muestras ocasionales de quien es el personaje que está habitando en cada momento. Eso nos informa de entrada que hay un cuerpo original, aunque se tarde mucho en deshacer la madeja y descubrir quien es. La historia que se va desvelando es un thriller con drogas de diseño y una trama de corrupción policial bastante convencional, aunque elevada por la estructura narrativa.
La historia tiene un arranque potente y la película cuenta con una acertada dirección que imprime un ritmo narrativo alto a la acción. La decisión de intentar explicar el porqué de todo no me terminó de convencer, aunque me parece respetable. Realmente no me hacía falta saber por qué el protagonista cambiaba de cuerpo cada doce horas, hubiera preferido que ese detalle no se desvelara, porque todo lo demás cuadra muy bien. Los actores están correctos en sus roles y cuando llegan las escenas de acción resultan espectaculares, muy deudoras de la saga de John Wick.
Spiritwalker me ha parecido un thriller correcto, bien realizado, que probablemente no pasará a la historia del cine, pero que no me cabe duda que satisfará a los aficionados al género.
(c) 2020 Jordi Flotats
Ficha Técnica:
- Título original: Yoocheitalja
- Año: 2020
- Duración: 1h 48min
- País: Corea del Sur
- Director: Yoon Jae-keun
- Guion: Yoon Jae-keun
- Reparto: Yoon Kye-sang, Lim Ji-yeon, Park Yong-woo, Park Ji-Hwan Yoo Seung-Mok, Lee Sung-Wook, Seo Hyun-Woo, Baek Do-Gyum, Kim Seung-Hyun