JOHN WICK: CAPÍTULO 3 - PARABELLUM

Tercera entrega de las películas de John Wick, que como la anterior, continúa justo donde termina la segunda. Aunque argumentalmente la película no aporta mucho, su gran reparto, su imaginativa puesta en escena y sus excelentes escenas de acción constituyen un festín para los aficionados al género.

En 2014 es estrenó John Wick, una película de acción protagonizada por un Keanu Reeves que llevaba unos años apartado de las grandes producciones y dirigida por los debutantes Chad Stahelski y David Leitch; dos especialistas en coreografiar escenas de acción y directores de segundas unidades. Chad Stahelski fue el doble de Keanu Reeves en The Matrix. La película tiene un argumento tan simple como irónico: el sicario más letal de la ciudad, ya retirado, emprende una venganza salvaje contra la mafia rusa porque el hijo del jefe del clan principal ha matado a su perro y robado su coche. Esta simplicidad, junto con buenas dosis de sentido del humor, una puesta en escena muy imaginativa, buen reparto y unas escenas de acción espectaculares dieron lugar a una de las mejores cintas de acción de 2017. Gracias a todo esto y al boca a boca a través de internet, la película tuvo éxito y repercusión; catapultó las carreras de sus directores (David Leitch dirigió Atomic Blonde y Deadpool 2), puso de nuevo en el mapa a Keanu Reeves y propició dos continuaciones, John Wick: Pacto de sangre y John Wick: Capítulo 3 - Parabellum.

Al igual que la segunda entrega, John Wick 3 continua justo donde terminaba la película anterior. De hecho, las tres películas transcurren en el curso de la misma semana. La acción arranca con un John Wick herido y a una hora de ser proscrito dentro de la organización de sicarios que rinde cuenta a la misteriosa High Table. Su huida le pondrá en contacto con personajes de su pasado como la siniestra Directora (Anjelica Huston) o la letal Sofia (Halle Berry) mientras todos los asesinos del mundo van detrás de él. Mientras tanto la High Table envía a un Adjudicador (Asia Kate Dillon) a Nueva York para que pase cuentas con los que ayudaron a John Wick, contraviniendo así las reglas. Como en todas las películas de la saga, el hotel Continental, el elegante refugio de los asesinos de Nueva York, regentado por el elegante Winston (Ian McShane), tendrá un papel central en la historia.

John Wick 3 no pretende engañar a nadie; mantiene la continuidad con las dos anteriores entregas tanto temáticamente, porque el principio engancha directamente con el final de la segunda película, como formalmente. Las escenas de acción son la columna vertebral de la narración; el argumento gana en personajes y en intrigas pero continua siendo muy básico. Aunque esto no me parece necesariamente un problema; la película apuesta fuerte por la estética y la introduce en todos los niveles. La organización de asesinos, sus refugios seguros o sus rituales, son imaginativos, pero sin las localizaciones, su diseño de interiores y de vestuario podrían resultar algo ridículos. Los ejemplos más evidentes de esto son el Hotel Continental, con su diseño clásico y la sala donde trabajan las empleadas de la organización manteniendo los contratos activos, completamente retro.

Otro punto fuerte de esta saga es el reparto; Keanu Reeves no es el típico héroe de acción pero ya ja demostrado con películas como Speed y The Matrix que es perfectamente capaz de interpretar a uno. Los secundarios de lujo dan carne y huesos a personajes bastante acartonados sobre el papel; Ian McShane, Lance Reddick, Lawrence Fishburne, Halle Berry o Angelica Houston elevan el nivel de todas las escenas en las que intervienen.

Dicho todo esto el ingrediente principal de estas películas son las secuencias de acción. A diferencia de en las películas anteriores, en John Wick 3 se incluyen más escenas de lucha sin armas de fuego. La que transcurre en un museo de armas antiguas resulta tan espectacular como divertida, así como las escenas finales en una exhibición de arte con paredes de cristal. También hay escenas llenas de tiros en la cabeza y cambios de cargador en las que John Wick liquida ejércitos de sicarios al estilo de las entregas previas. El pasado como especialista y coordinador de escenas de acción de Chad Stahelski se nota viendo el cuidado por el detalle en la coreografía de estas escenas.

John Wick: Capítulo 3 - Parabellum pierde el elemento sorpresa de la primera entrega de la saga pero es una continuación sólida que mantiene los principales valores de estas películas. No me cabe duda que gustará a todos los aficionados al cine de acción, que nos quedaremos a la espera de una más que probable cuarta entrega.

(c) 2019 Jordi Flotats