REC

Una vuelta de tuerca al cine de terror

REC es el resultado de la colaboración de Jaume Balagueró y Paco Plaza, directores que tanto uno como otro han realizado en los últimos años algo que a priori parece complicado, que es ganarse la vida dirigiendo cine de terror en nuestro país. Con REC han permanecido dentro del género pero le han dado un giro muy interesante a sus estilos habituales de dirección.

Tanto Balagueró como Plaza habían optado en sus anteriores films por fórmulas más en la línea del actual cine de terror (Los Sin Nombre, Darkness, Frágiles, Romasanta), fórmulas que en mi opinión están bastante agotadas por la sobreexplotación de las últimas dos décadas. Curiosamente la colaboración de los dos directores en un proyecto tan claramente alimenticio como el documental OT: La Película, fue la que propició REC, un proyecto muchísimo más interesante (y más barato) que los anteriores.

En REC se pueden apreciar la combinación de muchos elementos distintos, la técnica de rodaje casi Dogma al estilo de The Blair Witch Project, los ambientes y algunas situaciones que recuerdan al cine de terror oriental y la fórmula clásica de películas de zombies junto con elementos de películas más modernas como 28 Días Después; todos ellos integrados perfectamente en un conjunto muy homogéneo que tiene como objetivo asustar y lograr que el espectador permanezca en tensión dándole los respiros justos para que no logre acostumbrarse. Y los objetivos se cumplen con creces, a mí me incomodó y a ratos incluso asustó (y no soy fácil de asustar en un cine), y a juzgar por las reacciones del público de la sala también lo logró con ellos. En pocas películas de terror he visto una reacción tan intensa del público como en REC.

En mi opinión las claves para que REC asuste son básicamente dos: el acertadísimo ritmo narrativo y la sensación de realidad que transmite la película que consigue que nos metamos en la acción, nos la creamos y finalmente nos asustemos.

REC simula ser la grabación de un reportaje para la televisión de un programa llamado ‘Mientras tú duermes’ en que un cámara y una presentadora cubren durante una noche la actividad en un cuartel de bomberos de Barcelona, mostrando su actividad y siguiéndoles en sus salidas. Cuando los bomberos que siguen tienen que hacer su primera salida y quedan atrapados en un edificio del centro de Barcelona todos deberán luchar para sobrevivir.

En todo momento sólo podemos ver lo que la cámara está rodando, produciéndose saltos en la acción cuando se para. El principio de la película, lleno de un humor socarrón nos muestra el rodaje de un reportaje que una vez montado y cortado podría estar en cualquier cadena de nuestra paupérrima oferta televisiva y no da pistas de la increíble tensión que tendrá la parte principal del film. En cambio sirve para introducir el medio de narración, el reportaje televisivo, que en mi opinión supone uno de los elementos fundamentales del film para transmitir sensación de realidad. Actualmente estamos tan inmersos y acostumbrados a la cultura televisiva que no sólo tenemos tendencia a creernos lo que aparece por televisión, sino que rizando el rizo, no otorgamos realidad o importancia a nada hasta que no aparece en la pequeña pantalla.

El guión de la película destaca en la buena construcción de los personajes, gente tan normal y corriente que podrían ser perfectamente nuestros vecinos. Esta verosimilitud en las actitudes acerca mucho la película al público y provoca la identificación con la acción. Cabe destacar también la buena interpretación del plantel de actores, caras poco conocidas por el gran público que cumplen a la perfección.

La puesta en escena también está muy lograda, destacando la primorosa preparación del escenario y la iluminación, que logran ambientes sórdidos e inquietantes en lugar tan cotidiano como un edificio del centro de Barcelona. La cámara al hombro da el tono realista, pero también cabe destacar los momentos en que la acción se nos cuenta en elipsis provocadas por haber tenido que haberla dejado en el suelo que sólo incrementan la tensión en el espectador.

Entre los escasos puntos negativos de la película sólo apuntaría al exceso de obviedad de alguno de los “sustos” que nos quiere provocar la película y algunos puntos flojos en la explicación de la trama, pero quedan completamente contrarrestados por los grandes aciertos del resto del film.

En definitiva REC me ha parecido una gran película que supone un soplo de aire fresco en el género de terror y una muestra que muchas veces es más importante el cómo se explica una historia que la historia misma.

(c) 2007 Jordi Flotats