LOOPER

Acción y viajes en el tiempo

Rian Johnson debutó con muy buen pie en el mundo del cine. Su ópera prima fue Brick, estrenada en 2005, constituye un excelente ejercicio de cine negro ambientado en el típico instituto americano. Brick me pareció una excelente película, con el tono, la inteligencia, el desencanto y el humor del mejor cine noir, trasladados a un entorno que juega un papel crucial en el inconsciente americano: el high school. También me permitió descubrir a un actor de gran talento, Joseph Gordon-Levitt, cuya aportación a la cinta es básica para que funcione tan bien como lo hace. Brick consiguió la aprobación casi unánime de la crítica y un modesto éxito de público, lo que garantizó la continuidad de Johnson en la industria. Su siguiente trabajo, The Brothers Bloom, de 2008, fue todo lo contrario, a pesar de su gran reparto y cuidada producción, la cinta no recaudó en taquilla ni tuvo muy buena recepción. Para el estreno de su tercer trabajo, Looper, han tenido que pasar más de cuatro años pero el director ha vuelto por la puerta grande con una mezcla de ciencia-ficción, cine negro y acción que cuenta con un reparto encabezado por Bruce Willis.

En un año 2074 dominado completamente por los sindicatos del crimen, cuando éstos quieren liquidar a alguien lo envían treinta años en el pasado, antes de la invención del viaje en el tiempo, donde un sicario lo espera y lo mata. Las víctimas se envían maniatadas, encapuchadas y con varios lingotes de plata atados a la espalda que sirven de pago al asesino. En 2044 un viajero enviado del futuro, Abe (Jeff Daniels), se ha hecho con el control de los bajos fondos y ha contratado a los sicarios, los loopers. Un looper trabaja para la organización hasta que le hacen "cerrar el círculo", es decir, hasta que le mandan a su yo del futuro y lo mata. En ese momento recibe una paga especial y es jubilado. El protagonista de la película es Joe (Joseph Gordon-Levitt), un joven looper, egoista, drogadicto y codicioso, que disfruta de su vida privilegiada en un 2044 en que mucha gente es solemnemente pobre. Todo le va bien hasta que intentan que cierre su círculo y su yo más viejo (Bruce Willis) logra huir, provocando que persigan a ambos sin piedad. Su única salida es matar a su yo viejo, pero éste parece tener sus propios planes para ejecutar en su pasado.

Formalmente, Looper tiene mucho del lenguaje y las características del cine negro; un entorno oscuro de moralidad difusa; unos personajes imperfectos, humanos, lejos de los estereotipos de "buenos" y "malos"; un cierto fatalismo en la forma de narrar la historia; e incluso un narrador, el propio protagonista, que nos introduce a su mundo con su propia voz. Este último recurso, que en general me parece peligroso porque muchas veces acaba sirviendo para explicar al espectador de viva voz lo que la película no ha sido capaz de explicar con imágenes y diálogos, se usa con moderación y acierto en la película. Pero Looper no es exactamente un film noir, también tiene considerables elementos de ciencia-ficción, tanto en la construcción del mundo futuro como en la trama de los viajes en el tiempo. Precisamente esta trama es la que posibilita plantear los temas básicos de la película, sobre cómo la violencia se auto-perpetúa y si realmente se puede cortar un ciclo de violento con más violencia. Sobre la coherencia es mejor ni entrar a hablar; como la mayoría de películas con viajes en el tiempo esta tiene grandes lagunas y agujeros lógicos. De hecho, el mismo guion ironiza sobre eso cuando el Joe le dice precisamente eso a su yo joven "no quiero hablar sobre los viajes en el tiempo porque si empezamos nos pasaremos todo el día hablando de ello, haciendo diagramas con pajitas".

Formalmente Looper me ha gustado bastante; la fotografía, la música y los efectos estan muy bien, así como el diseño de los escenarios y ciudades del futuro, no sé si realistas, pero sí bonitos, a veces desde una perspectiva feísta. Las escenas de acción también están bien rodadas, resultan trepidantes y tienen la duración justa. El hecho de tener a Bruce Willis protagonizando muchas de ellas también les da un plus añadido, realmente se le dan bien. Uno de los principales inconvenientes a priori de la película es la escasa semejanza física entre Bruce Willis y Joseph Gordon-Levitt, pero se ha resuelto de forma bastante satisfactoria; se ha aplicado un maquillaje sutil del actor más joven para reforzar la semejanza y Gordon-Levitt ha realizado un gran esfuerzo para imitar las expresiones de Willis. La única lástima es que Gordon-Levitt y Bruce Willis son actores muy distintos; Willis tiene carisma, una indudable vis cómica y una expresividad bastante limitada; Gordon-Levitt es mucho más camaleónico y versátil, pero menos característico, menos carismático, por eso imitar a Willis le ha supuesto una limitación. A pesar de ello, ambos están muy bien en sus roles. También me pareció muy buena la elección de Emily Blunt, una actriz elegante y expresiva que compone al personaje más rico de la película, una madre coraje con los suficientes matices como para humanizarla y hacerla más creíble.

Lo que menos me ha gustado de la película la relativa indecisión del argumento y su ritmo. En la mezcla hay varios elementos: en primer lugar la ambientación en un futuro cercano bastante distópico pero que parece bastante realista en algunos aspectos, con la riqueza está en manos de muy pocos, sin servicios públicos y con unos Estados Unidos empobrecidos, sin petróleo que ya no son la potencia hegemónica de la actualidad. También están los elementos más fantásticos, como que, por mutaciones genéticas o por evolución, haya parte de la población con capacidades telequinéticas muy leves o los viajes en el tiempo. Luego está la trama de acción, con la persecución del protagonista, mezclada con el tema central de la cinta, la conveniencia de evitar futuros actos violentos con más violencia. Todos esos elementos me parecieron interesantes a priori, pero la combinación no me acabó de parecer redonda. La película empieza fuerte definiendo el mundo donde sucede, pero luego se olvida un poco y queda un poco desdibujado, falto de detalle; también arranca con ritmo de película de acción para introducir la trama, pero luego frena, traslada el foco a un escenario neutro y pasa allí demasiado rato construyendo las relaciones entre los personajes, que, eso sí, justifican plenamente la conclusión de la cinta. Debido a esta falta de determinación, a Looper le falta acción para ser una película trepidante, más rigor en la ambientación para ser una cinta de ciencia-ficción especulativa y algo más de ritmo narrativo para juntar mejor sus diferentes partes. Por todo esto, Looper me ha parecido una película correcta pero no redonda; está muy bien realizada, bien interpretada, es interesante a ratos y trepidante a ratos. En conjunto no está mal, pero creo que Rian Johnson es capaz de más, ojalá acierte de lleno en su siguiente proyecto.

(c) 2012 Jordi Flotats